En estas épocas invernales, solo de pensar en meterse a bañarnos, desvestirnos para mojarnos, nos da más frío, lo ideal sería poder quedarnos todo el día en nuestra camita calientita, pero el baño diario es algo que no podemos evitar, sin embargo muchas veces si evitamos el baño de nuestro peludo, porque ello implica, casi siempre, terminar empapados regularmente con agua fría (porque casi a todos se les baña en el jardín, la azotea o el patio donde no hay toma de agua caliente para conectar la manguera o llenar la cubeta) y horas de lucha con tu perro para poderlo secar.
Y es que debemos recordar la importancia del secado en nuestros peludos, porque dejarlos húmedos en épocas de frío puede provocarles enfermedades respiratorias, de oído y musculares. Lo ideal es secarlos con secadora, pero sus oídos tan sensibles hacen que se muevan sin control, y muchas veces nos damos por vencidos a media batalla y después de unos días debemos de buscar al veterinario.
Una de las opciones que tenemos es llevarlos a las estéticas caninas a que ellos los bañen, ya que ahí cuentan con el equipo necesario para bañarlos y secarlos en menos tiempo que nosotros, pero esta opción suele ser costosa y no todos podemos pagarla.
Obviamente otra opción es no bañarlos, pero la falta de higiene puede provocar también muchos problemas de salud, sobre todo en la piel, ya que la falta de higiene les puede provocar intensa comezón en la piel que puede terminar incluso en laceraciones que requieran atención médica y no olvidemos el olor de perro sucio que muchas veces resulta intolerable y terminamos corriendo al pobre animal de las habitaciones e incluso de la casa, haciéndolo pasar mucho tiempo a la intemperie lo que, con estos fríos, puede provocarle enfermedades respiratorias.
Así que tenemos otra opción, puedes bañar en seco a tu perro. Esta opción por mucho una de las mejores opciones que puedes tomar en épocas de bajas temperaturas, ya que te resuelve el problema de la limpieza y el olor sin enfrentar gastos elevados o situaciones incómodas.
La rutina del baño en seco es relativamente sencilla
Primero debes cepillar el pelo de tu peludo, esto ayuda a quitar pelo muerto y a desenredar nudos previos. Para este primer paso puedes usar un cepillo o carda de púa larga. Es muy importante que no te saltes este paso o lo demás será complicado.
Una vez cepillado debes de aplicar el shampoo en espuma seca, pon una cantidad generosa en un trapo y pásalo sobre tu peludo evitando que haya contacto con ojos, oídos y hocico. Con el trapo o con tus manos extiende y frota la espuma por todo el cuerpo de tu peludo para que llegue hasta la piel y no se quede solo en las puntas del pelo.
Poco a poco la espuma se va convirtiendo en un polvo como talco, una vez que no haya espuma, pasa un trapo seco para retirar el talco que se formó y vuelve a cepillar para asegurarnos de que no quede rastro del polvo que pueda provocarle comezón.
Después del baño en seco puedes utilizar toallitas húmedas para limpiar los lagrimales y contorno de los ojos de tu peludo y sus oídos.
Y para dejar guapo guapo a tu peludo, el paso final puede ser rociarlo ligeramente con un perfume para perro que le brinde un agradable aroma y es mucho mejor aquellos que tienen fragancias tranquilizantes como lavanda, melissa o vainilla que ayuden a tu peludo a terminar de relajarse en este proceso de belleza.
Ahora sí, no hay pretextos para que tu perro esté guapo y elegante incluso en época de frío. Además, con esta rutina podrás fortalecer vínculos afectivos ya que se requiere mucho contacto físico e incluso un poco de masaje para él.