A todos nos gusta consentirnos y apapacharnos, amamos esos pequeños momentos que podemos dedicarlos a nosotros mismos, ya sea con un largo y caliente baño, un momento a solas con una buena taza de café o un delicioso y relajante masaje. Pues, así como nosotros necesitamos esos pequeños momentos también nuestros gatitos los necesitan y lo agradecen.
Además, no es solo cuestión de estética o de tener un gato súper mimado y consentido, es un tema de salud. Nuestros amigos de 4 patas requieren ciertos cuidados de los que no todo el mundo nos habla, como por ejemplo el cuidado de sus patitas.
Sus patas no solo son su medio de transporte, son manos y guantes, pies y zapatos. Las almohadillas, la parte inferior de la pata de tu gato, la huellita, es una parte muy importante para ellos, ya que por un lado da soporte y amortiguación a las articulaciones de las patas, también les ayuda a aislar las temperaturas extremas del piso, les ayuda a caminar sobre terrenos ásperos sin lastimarse y sobre terrenos muy lisos sin resbalarse.
Es muy necesario que cuidemos de sus patitas para que nuestro peludito pueda dar lo mejor de sí ¿Imaginas saltar o caminar con una piedra en el zapato sin poder quitártela? o ¿caminar sobre la arena caliente sin poder quejarte ni poderte poner sandalias? O que tal ¿ir al súper con una cortada en la planta del pie? Suena doloroso.
Ahora imagina que no puedes decir que te pasa y tampoco puedes curarte tu solo, nosotros somos los responsables del bienestar de nuestros peludos y debemos prestar atención a cualquier cambio en su comportamiento para poder descifrar que está mal y como remediarlo.
Siguiendo estos 5 sencillos pasos podrás ayudar a tu minino a que su andar por la vida sea placentero y que sus saltos sean por amor y no por dolor.
- Un corte de uñas es súper necesario, la uña debe de rosar ligeramente el suelo, si tu gato tiene las uñas muy largas puede tener problemas al caminar, se le pueden astillar y puede atorarse con telas como cortinas, colchas o los sillones de la sala o incluso se les puede romper lo cual sería peligroso. Pídele a tu veterinario que te enseñe a cortarle las uñas, pero si te da miedo y te pones nervioso, mejor que lo haga un profesional, porque si cortas de más y das a la vena será muy doloroso para tu peludo y algo traumático para ti.
- Debemos recortar el pelo que crece en la parte inferior de los gatos de pelo largo y limpiar bien entre las almohadillas, esto es para evitar nudos que puedan lastimarlo cuando camina y que no se le enreden objetos.
- Las almohadillas se pueden irritar, agrietar o resecarse con facilidad ya que están expuestas todo el tiempo y tienen contacto con diferentes ambientes, de la humedad puede pasar a un calor extremo o frio intenso, por ejemplo. Es por ello que debemos de hidratar y humectarlas bien y para ello podemos usar cremas especiales para almohadillas.
- Un masaje de vez en cuando no le cae mal a nadie y menos a tu gato, en especial si ves que tiene sus almohadillas irritadas; ya sea con un bálsamo o con una crema o sin nada, aprovecha esos minutos frente a la tele o antes de dormir y dale un masaje en sus patitas, veras que te lo agradecerá.
- Evita temperaturas extremas en tu hogar para que sea más satisfactorio para tu gatito caminar por toda la casa.
Ahora sí, siguiendo estos consejos tu peludo podrá presumir sus patitas de lujo y ser la envidia del vecindario, y si él queda bien, tú también.